Para los padres, puede resultar difícil enseñar a sus hijos a ordenar correctamente la ropa y a utilizar los muebles. A pesar de ello, es vital que los niños aprendan estas habilidades para evitar que se acumule el desorden, ahorrar tiempo a la hora de buscar objetos y sentirse satisfechos cuando ordenan su zona.
Los padres deben empezar demostrando a sus hijos cómo ordenar su ropa, por ejemplo, por tipo (camisas, pantalones, faldas, etc.), color, talla y temporada. De este modo, los niños aprenderán valiosas lecciones de vida, como la responsabilidad, la autodisciplina y el cuidado de sus pertenencias.
Esta clasificación hará que sea más fácil para el niño encontrar lo que necesita cuando vaya a vestirse. Si el niño es demasiado pequeño para esto, los padres pueden ayudarlo a etiquetar cada prenda con una pequeña etiqueta para que sea más fácil para él identificar lo que es.
Una vez que el niño sepa cómo clasificar su ropa, los padres deben ayudarlo a decidir dónde guardarla. Esto puede incluir el uso de un armario, una cómoda, una cesta de ropa sucia, etc. Se recomienda que los padres muestren al niño cómo colgar la ropa en el armario, cómo doblar la ropa y cómo colocarla en los cajones de la cómoda. Si los padres tienen alguna prenda especial que deba colgarse, deben ayudar al niño a colgarla en un lugar apropiado.
Los padres también deben ayudar al niño a aprender cómo usar correctamente sus muebles. Esto puede incluir mostrarle cómo abrir y cerrar la puerta de su armario de forma segura, cómo empujar suavemente los cajones para abrirlos y cerrarlos, cómo usar una escalera para alcanzar los lugares altos, y cómo limpiar los muebles con cuidado. Esto les ayudará a los niños a mantener sus muebles en buen estado por más tiempo.
Una vez que los padres hayan mostrado al niño cómo organizar su ropa y usar correctamente sus muebles, es importante que los padres lo alienten a seguir estas instrucciones. Esto significa establecer límites y recompensar al niño cuando los siga. Esto puede incluir el uso de un sistema de recompensas, como la entrega de premios, elogios o simplemente más tiempo para pasar con los padres.
Enseñar a un niño a organizar su ropa y usar correctamente sus muebles puede ser una tarea desalentadora para los padres. Sin embargo, es importante que los niños aprendan estas habilidades para mantener un espacio limpio y ordenado.
En conclusión, para lograr el propósito de establecer un hábito de organización correcto y duradero, los padres deben ayudar al niño a clasificar su ropa, mostrarle cómo guardar y usar correctamente los muebles, y alentarlo a seguir estas instrucciones. Si los padres se comprometen con esta tarea, podrán ayudar al niño a aprender importantes lecciones sobre responsabilidad, autodisciplina y cuidado de sus posesiones.