María es una madre mexicana que busca la máxima seguridad en materiales para sus hijos. Quiere asegurarse que los muebles de su hogar sean seguros para ellos y no contengan ningún material tóxico. Busca muebles hechos de materiales naturales, como la madera, y evita los plásticos o metales que puedan contener químicos nocivos. María quiere que sus hijos tengan un hogar seguro y cómodo en el que puedan disfrutar de su infancia.
A la hora de elegir los muebles para tus hijos, la seguridad debe ser siempre una prioridad. Busque muebles fabricados con materiales resistentes y duraderos, y asegúrese de que las piezas sean lisas y no tengan bordes afilados. Esto ayudará a evitar cortes y arañazos. Además, asegúrate de elegir muebles que sean fáciles de usar para tu hijo y que no se vuelquen con facilidad. Siguiendo estos consejos, podrás crear un entorno seguro y cómodo para que tu hijo disfrute.
Los materiales más comunes que se utilizan para la fabricación de muebles para niños son:
1- la madera
2- el plástico
3- el metal.
Aunque todos estos materiales son seguros, existen algunas formas y compuestos que se deben evitar.
1 - MADERA
La madera debe ser recubierta un material natural, ya que las pinturas y barnices pueden contener sustancias químicas tóxicas. Además, la madera no se derrumba ni se quiebra fácilmente, lo que la hace ideal para muebles que serán utilizados por niños pequeños.
Es importante asegurarse de que los muebles de madera para niños no contengan barniz o pintura que pueda contener plomo, que es tóxico para los niños, y el barniz puede contener químicos nocivos por lo que hay que asegurarse que este sea a base de agua.
También es importante asegurarse de que los muebles no estén hechos de madera tratada químicamente, ya que esto también puede ser tóxico para los niños.
2 - PLÁSTICO
El plástico debe ser de grado alimenticio y no debe contener ftalatos.
Las resinas de los plásticos alimentarios deben cumplir con ciertos requisitos químicos para asegurar que no sean tóxicas, estas resinas deben ser inertes, es decir, no deben reaccionar químicamente con los alimentos, debe estar hecho de materias primas que sean aptas para el contacto con los alimentos.
También deben ser resistentes a la oxidación y a la degradación biológica.
Y debe estar libre de contaminantes como metales pesados, bacterias y otros microorganismos.
3 - METAL
El metal debe ser libre de metales pesados. Los metales pesados como el mercurio, el plomo y el cadmio son tóxicos y deben evitarse en los productos infantiles.
Los fabricantes de productos infantiles deben asegurarse de que sus productos no contengan estos metales y de que cumplan con los estándares de seguridad. Los muebles para niños deben estar hechos de materiales duraderos pero seguros.
En conclusión:
Los muebles baratos que se encuentran en los centros comerciales a menudo están hechos de materiales de baja calidad que pueden ser tóxicos o peligrosos.
Un ejemplo de un mueble de baja calidad es una cuna de plástico. Las cunas de plástico a menudo están hechas de materiales tóxicos y peligrosos para los niños.
Es mejor invertir en muebles un poco más caros pero de buena calidad que durarán más tiempo y serán más seguros para los niños.