Los problemas de visión en niños pueden ser difíciles de detectar, ya que a menudo no hay señales obvias. Por esta razón, es importante que los padres estén atentos a cualquier cambio en el comportamiento de sus hijos, especialmente si presentan alguno de los siguientes síntomas:
- Dificultad para ver de lejos o de cerca
- Visión borrosa
- Dificultad para enfocar la vista
- Mareos
- Fatiga ocular
- Irritabilidad
- Cambios en el patrón de sueño
- Problemas en el aprendizaje
- Movimientos oculares anormales
Es importante que los padres estén atentos a cualquier cambio en el comportamiento de sus hijos, especialmente si presentan alguno de los síntomas anteriores. Si sospechan que su hijo tiene problemas de visión, es recomendable que acudan a un especialista para que lo evalúe.